Todo tiene su tiempo

TODO TIENE SU TIEMPO

A veces queremos respuestas exprés y que todo se solucione rápido, pero tenemos que aprender que esperar nos ayuda a desarrollar la paciencia.

Recordemos que la paciencia es la virtud de aguantar y esperar sin perder el ánimo.

Todo sucede cuando tiene que suceder, los tiempos de Dios no son nuestros tiempos.

La humildad es una virtud muy importante para desarrollar la paciencia en medio de la adversidad o cuando esperamos la respuesta de Dios para tomar una decisión importante.

En el tiempo de espera seamos humildes practicando justicia y bondad, para seguir brillando y honrando al Rey.

Los tiempos de Dios son perfectos y todo sucede cuando tiene que suceder.

Sé feliz!